martes, 31 de octubre de 2017

It Keeps Raining. Fats Domino.

Otro grande que se va.

Fats Domino, el genial y bondadoso símbolo de los albores del rock and roll y la voz y el piano detrás de éxitos perdurables como "Blueberry Hill" y "Is not That a Shame", falleció el martes a la edad de 89 años.


Fats Domino
(Everett Collection. En Rolling Stone)

La fórmula era sencilla: boogie woogie ralentizado, blues acelerado, todo cantado sin énfasis, siempre con calidez y elegancia y con su voz única y característica: de terciopelo característica. Sin descuidar el glamour: los trajes y sus impagables anillos. El legado de Fats es incalculable. Siempre transmitía felicidad, hasta en las letras tristes.

Los Beatles, que lo adoraban como a un dios. 

Continuó viviendo en el mismo barrio proletario en el que había nacido, el Ninth Ward de Nueva Orleans. En una ciudad plagada por la delincuencia, Fats aparcaba su Cadillac rosa en la calle. Nadie osó tocarlo. Robarlo, romperle un cristal, o rayarlo siquiera, hubiese supuesto buscarse un serio problema con los lugareños, para quienes Fats era una institución, un ente sagrado.

Había algo desconcertante, erróneo, incomprensible, en la imagen de un Fats Domino entristecido. Era un fallo en el tejido de la realidad, una grotesca incorrección. Si Dios escribe recto con renglones torcidos, aquello era aún peor, un borrón imperdonable. Era como contemplar el sol saliendo del revés, o a Blancanieves haciendo la calle. Algo que tu niño interior no debería ver. Los millones de fans que este maravilloso individuo se ganó a lo largo de varias generaciones, entre quienes me incluyo, teníamos una palabra perfecta para definir lo que él nos transmitía: felicidad.

Solo espero que le hagan una estatua, o que le pongan su nombre a un planeta, o que algún país (¿qué tal el nuestro?) adopte una de sus melodías como himno nacional. Y si resulta que hay cielo, y si Dios tiene buen gusto, que suene su versión de «Blueberry Hill» cuando entremos en él.




A mi me gusta especialmente su canción It Keeps Raining de 1961. Dos versiones: la grabación original, musicalmente muy conseguida  con el revoloteo de guitarra y redonda del acompañamiento y del intermedio de viento exactos; y en directo en Austin, Texas en 1986, en que la sonrisa y naturalidad de la interpretación resalta con la letra 



que otros muchos habrían interpretado llorando y mesándose los pelos. Y los 3 trompetistas y los 4 saxofones.

Y que al llegar al cielo, después de Blueberry Hill, suene también It Keeps Raining. Por favor.


lunes, 30 de octubre de 2017

Apéndice. Gottfried Benn.

Gottfried Benn irrumpió en el panorama literario alemán en 1912 como un bisturí rasgando fieramente tejidos y órganos. No en vano era médico militar y el poemario se titulaba Morgue y otro poemas. Un paseo nada lírico y sí expresionista y, también, tremendista y objetivo. 


Operación de apéndice
Christian Schad 1929

En él se encuentra este Apéndice que es de lo más suave del libro.  Que ilustra cómo hasta las operaciones aparentemente más sencillas pueden tener complicaciones. Y más a principios del siglo XX; en los inicios de la cirugía moderna.

Apéndice 

Todo está limpio y listo para el corte.
Humean los bisturíes. El vientre está pintado.
Bajo blancos paños, algo que gime.

“Señor catedrático, cuando usted guste.”

El primer corte. Como quien corta pan.
“¡Pinzas!”. Brota algo rojo.
Más hondo. Los músculos: húmedos, brillantes, frescos.
¿Hay un ramo de rosas en la mesa?

¿Es pus lo que salta?
¿Habrán rasguñado el intestino?
“Doctor, si está usted de pie contra la luz
no hay dios que vea el diafragma.
Anestesia, no puedo operar,
este hombre se va a paseo con su panza”.

Silencio lúgubre, húmedo. En el vacío 
tintinean unas pinzas caídas al suelo.
Y la enfermera de mente angelical 
ofrece tapones de algodón estéril.

“¡No puedo encontrar nada en esta porquería!”
“La sangre se oscurece. ¿Fuera la mascarilla!”
“¡Pero por Dios, amigo mío, 
fíjese usted en lo que hace!”
Todo revuelto. Por fin: ¡lo tengo!
“¡Cauterio, enfermera!”. Un siseo.

Esta vez tuviste suerte, hijo mío.
La cosa estaba a punto de perforarse.
“¿Ves esa pequeña mancha verde?-
Tres horas más y el estómago hubiese estado lleno de porquería.”

Estómago suturado. Piel suturada. “¡Vendaje! Señores.”
“Que tengan un buen día, señores.” La sala queda vacía.
Furiosa la Muerte castañetea y rechinan sus mejillas
mientras furtiva se escabulle hacia el pabellón de los cancerosos.

De Morgue y otros poemas, (1912)
Gottfried Benn (Mansfeld, 1898 – Berlín, 1956)


viernes, 27 de octubre de 2017

Carlos Puigdemont Casamajó, "el confuso"

Dedicado a Carles Puigdemont Casamajó.





Es la canción Epitafio de King Crimson, cuyo estribillo dice 

Confusion will be my epitaph
As I crawl a cracked and broken path
If we make it we can all sit back
And laugh
But I fear tomorrow I'll be crying,
Yes I fear tomorrow I'll be crying
Yes I fear tomorrow I'll be crying


o pasado a castellano 

La confusión será mi epitafio
Mientras camino por un sendero agrietado y roto
Si lo hacemos, todos podemos recostarnos
Y reír
Pero me temo que mañana estaré llorando,
Sí, temo que mañana estaré llorando
Sí, temo que mañana estaré llorando

o en catalán, (si us plau), de Google translator

La confusió serà el meu epitafi
A mesura que rastrejo un camí trencat i esquerdat
Si ho fem, tots podem seure
I riure
Però em temo que demà estaria plorant,
Sí, em temo que demà estaria plorant
Sí, em temo que demà estaria plorant

Carlos Puigdemont Casamajó, "el confus" o "el confuso". 

¡Adiós!, ¡Adiós!, ¡Adiós!



martes, 17 de octubre de 2017

Refugee (1979); adiós a Tom Petty

Don McLean dedicó a Buddy Holly, en el inolvidable American Pie, el verso The Day the Music Died.





Tom Petty en 2016 ( de Wikipedia)

Me acuerdo de ese verso, en este octubre en que ha fallecido - el día 2 - Tom Petty. Hombre de música y artista de muy largo recorrido, su rock, su gran pop-rock, ha estado vigente más de cuarenta años, desde sus comienzos en 1976 con su grupo The Heartbreakers.

Dos semanas después de su adiós, repasando muchas de sus canciones y recordando, también, su paso por los Traveling Wilburys y la energía de sus últimos años; este octubre hemos vuelto a encontrarnos con "el día que murió la música".




En 1979 grabó el album Damn the Torpedoes, con lo que, en ciertos círculos, comenzó a sonar y a hacerse algo popular en nuestro país. Entre las 20 mejores canciones de 1980 del programa Domino de Gonzalo Garrido, se encontraba Refugee, que sigue sonando prodigiosamente en este octubre de 2017.


jueves, 12 de octubre de 2017

Explosión de vida del Cámbrico. Susana Barragués.

Susana Barragués ha dado a la luz este 2017 La perla de la poesía; un poemario insólito en que la ciencia ocupa un lugar central. En él, criaturas diversas, del presente y del pasado, hablan en primera persona en presente y, también a veces, elucubrando poéticamente acerca de su futuro, evolución y de su papel en la tierra. La precisión del lenguaje descriptivo y la novedad de alguno de los animales nos llevan a una poesía didáctica que retoma las mejores prácticas en ese género que fue tan habitual en el siglo XIX y en los inicios del XX. 


Burgess Shale (Middle Cambrian), British Columbia. (Wikipedia)

En el poema Explosión de vida en el Cámbrico, la Pikaia, uno de los fósiles aparecidos en Burgess Shale, que es considerado el primer cefalocordado, se da cuenta de su propio ser y características. Es un fascinante viaje desde el Cámbrico al siglo XXI en 40 versos. 

Explosión de vida del Cámbrico

Soy la Pikaia, la primera cefalocordada, la notocorda.    
La del novísimo vestido de vértebras: escalera de teclas.                     
Últimamente habito en un cuerpo soñado por otro, no por mí.
Me sucede que vivo y busco a mi enemigo. Busco a Dios.        
El mundo tiene frutos de significado, pero yo no consto.           
Estoy exhausta y he surgido en esta suerte de tubo cuyo inicio es la frente.
Soy la que empieza el érase. Conmigo nace la cabeza.  
Mía es la primera médula espinal.            
En este estupor vivo yo ahora: he tomado conciencia de que soy
y lo que estaba haciendo en ese instante
era retozar en corrientes saladas y calientes con flujo de hélice.
A mi alrededor se mecen cientos de criaturas, cada cual con su corona de principio.
Todos hemos explotado de forma repentina. Estamos en la Gran Eclosión.
Porque en el inicio de hoy, todos los monstruos se abren.
Existe el trilobites, el gusano y el alga calcárea:
los inocentes han tomado nueva forma en la nueva era del mundo.
Yo derivo en este ser, a medias entre la posibilidad e incertidumbre.
De mí saldrán los labios que buscarán besos.
Las patas que darán saltos.
Los cuerpos que se ceñirán al agua.
Las manos que tocarán otras manos.
Las bocas que buscarán frutos.
La transparencia del lenguaje será la espada que corte mi cabeza en dos mitades.
Una sensación hermosa ha sido robada,
la de salirse del continuo creacional para entender que se es único.
Hay que salir de la mente para poder entenderlo y al volver,
como se vuelve de un paseo donde la muerte ha dejado su paz, comprender.
¿De qué hablo? De la gran diversificación,
de que todo se haya creado, sin que ni siquiera yo me salvara de nacer.
En mi individualidad, ahora sólo deseo acercarme a lo demás.
Soy la única que sabe que estamos separados, que se es por fuera de los otros.
Doy nacimiento al amor, fruto de la experiencia palpitante de entender
los propios límites que sitúan al Uno en Su Cuerpo. Nadie antes de mí amó.
Lo que llamarán pasión es sólo el fulgor de un cordal vertebrado.
Estoy sola por dentro de mi cabeza, por eso sé que soy yo.
En el vacío grito: ¿Cuánto estoy?
Nada me responde. En el barrizal ciego del mundo creado
hay una perla que refulge sobre el lodo.
En su superficie brillante he visto por primera vez mi rostro.
Comprendo que amarme sólo a mí misma no satisface. 

Susana Barragués
(Bilbao, 1979)




miércoles, 4 de octubre de 2017

Esto no va de independencia...

Frases lapidarias



Esto no va de independencia, va de decidir y de poder votar. Esto no va de independencia, va de democracia.

Pep Guardiola en el video de apoyo a la Assemblea Nacional Catalana  (ANC) de 24 de septiembre en El Mundo.

Insólito. Como tantas declaraciones y acciones de los catalanes independentistas en estos días. A uno lo que le parece es que esto es la puesta en práctica del catalanismo "a más a más". O dicho de otra forma: echarnos el aliento en la oreja.