jueves, 23 de octubre de 2014

Dos temas

Ante los temas de actualidad que, si fuéramos cazadores, podríamos calificar como de "caza mayor" parece preferible enlazara opiniones solventes y sensatas que siempre serán mejores y de más solvencia que nuestros pobres comentarios amateur.

Sobre la corrupción les traslado a la Tercera de ABC escrita por el teólogo Olegario Fernández de Cardedal de título ¿Qué fue de la ética civil?,  aparecida ayer. Me interesa, sobre todo, la parte central en que se habla de cómo:

Se relegó la ética cristiana por superada, y no se cultivó esa ética civil. Más aún, algunos la pusieron bajo sospecha de ideología, o la identificaron con el programa de un partido político. Pero la ética no es eso. Es la entrega del hombre a un orden propio de realidad, esencial: el bien y el mal, la culpa y la gracia, el deber y la responsabilidad, la perfección y la felicidad. Su exilio de los planes de estudio o la contraposición con alguna otra materia como la religión ha sido mortal. Las consecuencias son el vacío moral y los hechos que nos asustan hoy.

Es una cuestión sobre la que el buzo viene hace tiempo barruntando y que le gusta ver escrita y sustentada por alguien como el profesor González de Cardedal.

Sobre el ébola me gustaría que conocieran el artículo El ébola, en perspectiva de Francisco García Olmedo, siempre claro y solvente, en Revista de Libros. El inicio nos relata, con el formidable don para la difusión de la ciencia que tiene el autor, la etiología, manifestaciones y principales características de la epidemia del ébola. El artículo continúa, después, con un párrafo que sitúa a un país como España frente a la enfermedad.


España se encuentra a este respecto en una situación peculiar: es un país supuestamente desarrollado que no está suficientemente preparado para enfrentarse a epidemias como ésta, es un importante destino turístico y migratorio que recibirá inevitablemente el impacto de cualquier pandemia que se produzca y, además, es una de las principales fronteras europeas con el continente africano, espacio de refugio y eclosión de un gran número de zoonosis. No es éste el lugar de analizar en detalle los numerosos despropósitos ocurridos en relación con el insidioso virus, pero sí extraer algunas conclusiones en función de futuros episodios relacionados con ésta y otras zoonosis.

Al final se sacan las conclusiones pertinentes que les invito a que sigan leyendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario